anterior    aleatorio / random   autor / author   inicio / home   siguiente / next

        EL PADRE GUILLERMO

Alta noche ¡qué triste la bruma
cautiva de invierno!
Guadarrama tendía los fríos
sin luz, sin acento.
De la celda de Dios salió el ángel,
el padre Guillermo
con la cruz del pesar purpurina
hacia la morada
de lenta agonía.
La oración resonó melodiosa
del padre Guillermo,
y en su trémulo azul voló una alma
tranquila a los cielos.
Sola noche; las nébulas hondas
miraban alerta;
ni un sonido en el viento, las haces
mudas combatían de las nieves negras.
Aterido a su celda volvía
el padre Guillermo;
le guiaba en penosa tiniebla
celeste lucero.
En la hora mayor procelosa
llamaba al convento
y perdida la llave, en espera
quedó largo tiempo
rezando en la puerta.
Impiadosa la lívida nieve
cayó tristes horas
sobre el alba frente del santo Guillermo;
ya sus ojos no ven la tiniebla,
ven la aurora de Dios en el cielo.



José María Eguren


subir   poema aleatorio   Últimos poemas   siguiente / next   anterior / previous